EL ARTE DE PENSAR

Los pensamientos, esas ideas fugaces que se nos pasan por la cabeza, que nos preocupan y nos atormentan, que consiguen llevarnos a un mundo de imaginaciones probablemente imposibles o inexistentes, las cuales son placebo para escapar de la realidad, hacia un universo paralelo: nuestro propio universo, a veces individual y otras compartido. Aunque hay que admitir que no siempre es tan paralelo, y que a veces se entremezcla con la realidad, convirtiendo nuestra vida en un laberinto constante, en un acertijo sin respuesta, o un enigma sin resolver...

Pensar es bonito, es un arte, un arte como el amor, como la música, la escritura o la expresión, simplemente un arte como el vivir. Pensar nos hace evadirnos y viajar por el gran universo de los sueños, sí, esa parte de la mente tan remota y desconocida para todos los seres humanos. Precisamente los sueños son pensamientos que creamos constantemente en nuestro cerebro mientras dormimos, y que, de los cuales no recordamos ni la mitad, pero que en nuestro subconsciente, esos sueños, nos van cambiando poco a poco, hasta convertirnos en lo que acabaremos siendo: solo pensamientos...